Qué ver en un día en Aveiro y Costa Nova

Hoy os llevo hasta Portugal, para contaros que ver en Aveiro en un día. Una ciudad llena de encanto, a la que también llaman la Venecia de Portugal. Es tranquila, bien conservada y una opción estupenda para pasar un día  y combinarlo con una visita a Oporto, de la que ya os hable en otro post.

Os explicaré qué ver y que no os debéis perder en Aveiro y Costa Nova en un día.

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Nosotros fuimos en el puente de Noviembre. Desde Madrid, tardamos en llegar a Aveiro unas cinco horas y media por autopista. Al final de esta entrada os explico cómo llegar y el sistema de pago de las autopistas portuguesas, que a priori puede parecer un sistema un poco lioso.

Que hacer en Aveiro en Un día

Aveiro es una ciudad pequeña, por lo que en un día os dará tiempo de sobra para ver todos los lugares de interés. Podéis llegar a todos los sitios andando, disfrutando de un paseo por la orilla de sus canales y contemplando las fachadas de sus edificios Art Noveau.

Parar a tomar un vino verde en alguno de sus muchos bares, rodeado de casas tradicionales de pescadores y visitar sus bonitas iglesias y edificios religiosos. Por la tarde podéis ir de Aveiro a Costa Nova para conocer sus espectaculares playas. Os garantizo que el día se os pasará volando y además os quedaréis enamorados de esta zona de Portugal.

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¿Que podéis hacer en Aveiro?

  • Recorrer sus canales a bordo de un moliçeiro.
  • Perderse entre las callejuelas de sus barrios, parando en sus bonitas iglesias.
  • Tomarse un vino verde y un plato de bacalao en el Barrio de Beira Mar.
  • Pasar la tarde visitando Costa Nova.
  • Terminar el día disfrutando de sus salvajes e interminables playas.
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Los Canales y Moliceiros de Aveiro

Los primeros documentos en los que se mencionó a Aveiro datan del Siglo X. Su perfecta ubicación geográfica unida a los diversos recursos que tiene la zona, ya que está rodeada de salinas, abundante pesca y un incesante comercio marítimo, hicieron que fuera un lugar propicio para atraer a sus primeros habitantes. Aveiro se convirtió en una ciudad muy prospera hasta finales del S.XVI y a principios del S.XVII comenzó su decadencia.

En este periodo se cerró su canal principal, por la inestabilidad de la comunicación de la ría con el mar. Fue cuando Aveiro pasó su peor momento. Sin acceso al mar y ante la imposibilidad de usar el puerto, el estancamiento del agua de la laguna empezó a dar graves problemas de insalubridad provocando el inicio de una grave crisis económica y social que dieron lugar a que gran parte de su población emigrara.

Hasta principios del Siglo XIX no se resolvería el problema del canal que une la Ría al mar.

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Son ahora precisamente esos canales los que más fama han dado a Aveiro, recibe gracias a ellos el sobrenombre de la Venecia de Portugal. La verdad es que poco tiene que ver con Venecia.

Solo tiene en común con esta ciudad que se puede navegar por sus canales. Aquí en vez de góndolas, lo que se utiliza son unas barcazas llamadas Moliçeiros.

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Estas se utilizaban tradicionalmente para transportar el moliço, un alga que se extraía del fondo de la ría y que una vez seca, se utilizaba de abono en agricultura.

También hay otras barcazas que se utilizaban para transportar la sal. Eran capaces de llevar hasta dos toneladas, así que os podéis imaginar que su tamaño no es como el de una góndola sino que realmente son ¡¡barcazas¡¡

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Ahora mismo los moliçeiros de Aveiro se utilizan para transportar turistas. El recorrido en moliçeiro es de 45 minutos pasa por los tres canales de Aveiro y si queréis comprar con antelación los billetes podéis pasaros por Aquí.

Aunque sea una turistada, una de las mejores cosas que hacer en Aveiro es dar una vuelta en una de estas barcazas, ya que es un paseo muy agradable. El mejor momento para hacerlo es a primera hora de la mañana, cuándo hay menos turistas y podréis estar en el moliçeiro casi solos.

Las barcazas son muy grandes, a diferencias de las góndolas estas van a motor y mientras hacéis el recorrido os explicarán curiosidades de Aveiro.

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Recorrido por los canales de Aveiro

El moliçeiro inicia su recorrido en el canal central de Aveiro. Lo vais a identificar muy fácilmente puesto que hay cuatro estatuas que representan los oficios tradicionales de Aveiro que son la Salineira, A parceira do ramo, O fogueteiro y un Barqueiro.

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El embarcadero está frente al Edificio de Asamblea Municipal y al lado de varios edificios con fachadas representativas del Art Noveau. En uno de ellos se encuentra la Oficina de Información y Turismo de Aveiro.

El moliçeiro pasa después por el canal de San Roque. En este tramo podréis ver las casas más antiguas de Aveiro y varios puentes interesantes, como el Puente do Botirao, un puente peatonal con forma circular situado en el Barrio de Beira Mar. De este puente parte el cuarto canal que en el momento que lo visitamos estaba vacío ya que estaban realizando labores de limpieza. En esta zona es dónde se encuentran las coloridas casas de pescadores de Aveiro.

En uno de los lados del canal de San Roque hay un parque y en la otra orilla opuesta veréis las casas más antiguas de Aveiro.

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En la mitad del recorrido de este canal, verás el puente más antiguo de la ciudad, el puente de los Carabelos.

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Al final de este canal se encuentran los antiguos almacenes, hace unos años los reacondicionaron como viviendas. Son más parecidas a las casas de un pueblo del norte de Europa, que el de uno portugués.

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El moliçeiro vuelve sobre sus pasos y se introduce en otro de los canales, esta vez por la zona más moderna. Aquí podréis ver otro puente, el puente de los lazos de amistad.

El puente de los lazos de Aveiro, tiene tantos lazos, que parece la capa de un tuno. En Aveiro está prohibido poner candados en los puentes, así que en su lugar, lo que hicieron fue poner lazos de colores como símbolo de amor o de amistad.

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La ruta por este canal termina en la antigua fábrica de cerámica y el moderno edificio del hotel Meliá que tiene hasta embarcadero propio.

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Como moverse en Aveiro

Una vez en tierra, tenéis dos formas de recorrer la ciudad, paseando o en bici.

El coche lo tenéis que dejar aparcado, porque no lo necesitareis para visitar la ciudad. Además puede ser una pesadilla, puesto que tienen estacionamiento regulado en toda la ciudad. Nosotros lo dejamos en un parking que estaba al lado de nuestro hotel. Nos alojamos en el Aveiro Palace. Frente al hotel está el centro comercial Forum Aveiro. Cada día de parking nos costó 6€, nos vino muy bien para olvidarnos del coche.

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A parte de paseae, que es la mejor forma para disfrutar de la ciudad, a los que os guste ir en bici podéis hacerlo y gratis¡¡. Cerca del puente de los lazos de amistad hay una especie de kiosco verde se llama la Loja Buga, os dejarán gratuitamente una bici para que podáis recorrer la ciudad. También podéis recorrer la ciudad a pedales haciendo un free tour en bici por Aveiro podéis reservarlo Aquí.

Qué ver en Aveiro

Si no sois de bici y queréis conocer a pie la ciudad, para saber todo lo qué ver en Aveiro, hay recorridos gratuitos por la ciudad. Podéis apuntaros a un free tour por Aveiro Aquí.

El Barrio de Beira Mar

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Uno de los barrios que tenéis que ver en Aveiro es el barrio de Beira y sus coloridas casas. Era el barrio dónde vivían los pescadores. En la calle Cais dos Mercanteis os encontraréis muchas casas tradicionales de lo más fotogénicas.

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Si comenzáis el recorrido por el Ponte do Boairo, veréis que el brazo de canal se introduce en este barrio. Al final del mismo os encontraréis la Plaza del Mercado Peixe. Estas calles están repletas de restaurantes. Esta es una de las zonas de Aveiro dónde encontraréis un montón de restaurantes para comer, cenar o tomar algo.

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En Beira Mar hay dos pequeñas iglesias. La Igreja da Vera Cruz, la distinguiréis muy bien porque su fachada tiene dos preciosos paneles de azulejos azules, con motivos hagiográficos. La iglesia tiene una bonita virgen gótica hecha de alabastro que se talló en Nottingham, Inglaterra. Muy cerca de ésta, se encuentra la pequeña Capela de São Gonçalinho de planta hexagonal, construida entre 1712 y 1714. Su interior está decorado con varios retablos y esculturas.

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La ciudad tiene edificios muy relevantes del Art Noveau.  Aveiro es miembro de la “Réseau Art Nouveau Network”. En la ciudad hay diez edificios con preciosas fachadas que seguro, no os van a dejar indiferentes.

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Los balcones de estos edificios son de hierro forjado. Las molduras remarcan ventanas y balcones, con detalles florales decorando las fachadas de estos edificios primorosos y perfectamente conservados. Ejemplo de la arquitectura Art Noveau en Aveiro son: la Casa Edificio de Rossio, el de la Casa dos Ovos, la Casa do Major Pessoa, el Museo da República.

Nada más cruzar el canal central de Aveiro, os adentrareis en otra zona de la ciudad. Subiendo por la Rua de Coimbra os encontraréis con el Ayuntamiento y justo al lado con el Núcleo Museológico da Misericordia de Aveiro.

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Una de las Iglesias que tenéis que ver en Aveiro es La Iglesia de la Misericordia. Se terminó de construir a mediados del S XVII, justo en la época en la que la ciudad pasó sus peores momentos. Su fachada manierista fue decorada posteriormente, en el S XIX, con los azulejos azules tan típicos de Portugal.

Si seguís paseando, al final de la calle os encontrareis con otra plaza. El suelo está decorado con mosaicos en la que aparecen todos los signos zodiacales.

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Muy cerca se encuentra El Museo de Aveiro, que está ubicando en el Convento de Jesús. Aquí se encuentra  una recopilación de tallas, pinturas, cerámica, textiles y otros objetos que provenían de antiguos conventos de Aveiro que fueron cerrados.

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El convento de Jesús es otro de los lugares que tenéis que ver en Aveiro. Fijaros en su fachada porticada del XVIII. Su claustro es del siglo XV. Veréis una columnata renacentista y unas capillas manuelinas que están decoradas con azulejos. En su interior, la capilla mayor, también tiene las paredes cubiertas de azulejos azules.

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Catedral de Aveiro

Otro de los lugares que tenéis que incluir en la lista de que ver en Aveiro es su catedrál o Lacomo la llaman allí. Pertenece a la orden de los dominicos. Estos fueron los primeros que se establecieron en Aveiro. Más que una catedral parece una pequeña iglesia, por sus reducidas dimensiones. Se construyó en 1423 y tiene varios estilos arquitectónicos debido a las renovaciones a las que fue sometida. La fachada es barroca y en ella veréis varias esculturas que representan la Fe, la Caridad y la Esperanza.

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Su  torre se construyó en 1890 y conserva la campana original del antiguo convento. Las otras dos campanas, son de la iglesia de San Miguel, que fue demolida. En el interior encontraréis retablos de gran valor.

Tener en cuenta que no se permiten visitas en la Catedral y en las Iglesias de Aveiro mientras haya misas. El horario de la catedral es de Lunes a Sabado a las 8h30 y a las 19h00. Los domingos 8h3o-10h30-12h00-19h00.

El resto del tiempo están todas abiertas y no os encontraréis las puertas cerradas, como sucede en la mayor parte de Iglesias españolas, que solo están abiertas cuando hay misas.

Parque Infante Dom Pedro

Este encantador parque se construyó en 1862. En el pasado estaba ubicado aquí el Convento de San Antonio y es otro de los lugares que os recomiendo ver en Aveiro.

En la entrada os encontrareis un antiguo depósito de agua. Está situado en la Avenida de San Antonio. Más que un depósito de agua, tiene la apariencia de un gran faro, con sus 20 metros de altura. Se construyó en los años 20 y tiene su capacidad de almacenamiento es de 120 m3.

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Hay estanques llenos de patos, incluso había un ejemplar de un precioso pato mandarín. En el jardín hay un pequeño bosque de bambú, una avenida de tilos. Es un buen lugar para hacer una parada y descansar un rato.

De Aveiro fuimos a Costa Nova para pasar la tarde. A parte de ver las típicas casas de colores en Costa Nova, merece la pena ver cerca de Aveiro su costa y las playas cercanas.

COSTA NOVA

Costa Nova es un pueblecido situado al lado de Aveiro. Quizás su nombre no os suene mucho, pero seguro que habéis visto las fotos de sus casas de colores, sobre todo en Instagram y te mueres por hacerte una elante de ellas.

Pues si, Costa Nova es el sitio, este es uno de los lugares que debes ver en los alrededores de Aveiro. Reservar una tarde para conocerla. Os explico como llegar y que es lo que vimos en Costa Nova.

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Costa Nova es un pueblo que debéis incluir en la lista de lugares que ver en esta zona de Portugal. Sacar al menos un par de horas para visitar este pueblo tan fotogénico.

De Aveiro a Costa Nova hay tan solo diez minutos en coche. Está al lado, por lo que no tenéis excusa para venir hasta aquí. Si no queréis calentaros la cabeza, podéis apuntaros a un free tour en Costa Nova aquí para conocer todos los rincones de este colorido pueblo.

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Lo más característico de Costa Nova son sus casas con rayas de colores, completamente fotogénicas.

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Las casas de Costa Nova en su origen eran de madera. Los “palheiros” eran las construcciones tradicionales de los pescadores de esta zona de Portugal, se construían sobre estacas de madera.

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A mediados del S XIX la zona se puso de moda entre los intelectuales y políticos portugueses que comenzaron a frecuentar Costa Nova en verano. Los pescadores vieron el negocio y comenzaron a alquilarlas, pero antes les lavaron la cara pintando los paneles con vivos colores.

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Los palheiros típicos de Costa Nova con rayas rojas, amarillas o azules, imprimen a la localidad de una personalidad única.

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Que ver en Costa Nova

El paseo principal de Costa Nova se encuentra frente a la Ría de Aveiro. Allí es dónde están atracadas las barcas de los pescadores. Caminando por su largo paseo os encontraréis con una hilera de estas casas vestidas con sus rayas de colores.

Una de las cosas que hay que ver en Costa Nova son las casas de colores. Así que a parte de recorrer este paseo frente a la ría, perderos entre sus callejuelas, porque todo el pueblo está lleno de casas con vibrantes colores y construcciones peculiares, ya veréis que hay algunas que son mini casas.

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En el otro lado del pueblo, otra de las cosas que tenéis que ver en Costa Nova es la parte que da al océano atlántico. Allí os encontrareis con una playa impresionante y gigantesca. Las olas enfurecidas del Atlántico hacen las delicias de los que practican el surf.

Una de las cosas que os recomiendo hacer en Costa Nova es pasear por la playa da costa Nova do Prado, esta playa de Costa Nova continúa hasta unirse con la Playa da Vagueria.

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Otro de los lugares que tenéis que ver en Costa Nova es la Reserva Natural de las Dunas de São Jacinto. Estas dunas y las lagunas de agua dulce y salada ocupan 700 hectáreas. Las playas son gigantescas y salvajes. Las acacias y pinos que hay alrededor sirven de refugio para muchas aves.

Playa da Barra

Una de de las playas cerca de Aveiro que merece la pena ver y está a dos minutos en coche desde Costa Nova, es la Playa da Barra. Sobresaliendo veréis el faro más alto de Portugal con sus 62 metros de altura.

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Pese a que hacía un frío que pelaba, los aficionados del surf y del kite ni se inmutaban y se metían sin problema en las gélidas aguas del Atlántico. En uno de los lados de la playa hay un paseo dónde encontraréis varios bares para tomaros algo.

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Como llegar a Aveiro: Autopistas de Portugal

El sistema de autopistas en Portugal puede parecer un poco lioso a priori. Tener en cuenta que si no pagáis los peajes, os llegará una colección de multas impresionantes.

Os intento explicar como se hace el pago en las las autopistas portuguesas. 

Nosotros llegamos a Portugal desde la frontera de Fuentes de Oñoro, que es último pueblo español de la provincia de Salamanca.

Una vez que paséis por el puesto fronterizo portugués, el primer pueblo que os encontrareis es Vilar Formoso. Tenéis que continuar y seguir las señales que llevan a la carretera A25. Continua conduciendo y al cabo de un rato antes de llegar a Leomil veréis que un cartel que pone ¨vehículos extranjeros¨. Estar atentos a esta señal, está en el lado derecho de la carretera.

Cuando veáis la señal de easy toll, salir por allí. Veréis que se parece a una especie de vía de servicio, en la que veréis un control de peaje y una gasolinera. Aquí es dónde elegiréis la forma en la que vais a pagar los peajes por las autopistas portuguesas y son estas:

Ir al arco de control de peaje e introducir en la máquina una tarjeta de crédito. Las cámaras escanearán vuestra matrícula, os saldrá un papel en el que podréis comprobar que se ha registrado y asociado correctamente el número de la matrícula con vuestra tarjeta de crédito.

De esta forma, cada vez que paséis por un tramo de la autopista (lo sabréis porque viene indicado con un cartel con las tarifas y un arco con cámaras), os descontarán el importe de vuestra tarjeta de crédito. Esta es la opción que elegimos nosotros, la más sencilla, porque no tienes que hacer más. Una vez que hagáis esta validación os servirá durante un mes. Para más información os paso el enlace de las autopistas portuguesas y así podréis despejar cualquier duda.

La segunda opción es comparar en una gasolinera (en las de Galp la tienen) una tarjeta de prepago. Tiene una duración de 3 días y cuesta 20€. Se activa con un sms. Lo malo de esto es no saber cuánto has gastado y puede que te sobre o te falte dinero.

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Como llegar a Aveiro desde Oporto

Otra alternativa para ir a Aveiro desde Oporto es en tren o en bus. Para mí la opción del coche fue la mejor, pero si no lo tenéis hay excursiones desde Oporto para llegar hasta Aveiro y Costa Nova que podéis reservar Aquí.

En coche se tarda solo 45 minutos en llegar de Aveiro a Oporto y tendréis la libertad para poder llegar a sus preciosas playas y a Costa Nova.

Así que animaros a conocer esta zona tan bonita de Portugal. Si vais a estar unos días más en Oporto y queréis saber todo lo que no os podéis perder en esta ciudad, pasaros por éste post en el que os cuento todo lo que no os podéis perder.

Feliz fin de semana:)

11 comentarios en «Qué ver en un día en Aveiro y Costa Nova»

  1. Un post estupendo y una fotos fantásticas.
    Portugal tiene mucho encanto y la mayoría de sus habitantes son amables y muy «ayudadores».
    Un día dejamos el coche mal aparcado en Oporto y además en uno de los estacionamientos de una comisaría de policiía. Era de noche y no nos dimos cuenta.
    Al dia siguiente el coche estaba, ya imaginas, en el depósito de la grua.
    Flipamos cuando no vimos el coche y entramos en la comisaría. Se enfadaron unos policías con otros por no haberse dado cuenta de que estábamos aparcando allí y decidieron llevarnos ellos mismos en un coche patrulla hasta el depósito porque dijeron que era muy complicado llegar y que nos iba a ser muy difícil.
    Eso si, los de la grua nos hicieron pagar la multa, a pesar de las protestas de nuestros protectores.
    Lo dicho, disfruto mucho en Portugal, creo que tú también lo has hecho.
    Un saludo.

    Responder
    • Madre mía que aventura con el coche¡¡ Muchas gracias por tus palabras, la verdad es que nuestros vecinos portugueses son muy amables y educados, algo de lo que deberíamos aprender, efectivamente cada vez que ido a nuestro país vecino he disfrutado de la comida, de sus ciudades y de su gente que son una pasada. Un abrazo y pasa muy buena semana

      Responder

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