Tsetserleg, la Roca Taikhar y las Gargantas del Río Chuluut

Dejamos atrás Tsenkher y la rica barbacoa ovejera de la noche anterior para continuar la ruta por Mongolia. Nuestro siguiente destino estaba ubicado en el corazón de las montañas Khangai, la ciudad de Tsetserleg.

Os estaréis preguntando que se podrá ver en Tsetserleg y sobre todo dónde se encuentra esta ciudad. Tsetserleg es la capital de la provincia de Arkhangai y está situada en Mongolia Central.

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Son tres cosas las que se pueden ver en Tsetserleg: un monasterio reconvertido en museo, un lugar sagrado, la Roca Taikhar y un accidente geográfico, la garganta del río Chuluut.

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Tsetserleg significa «jardín» en mongol, ya que es una de las ciudades más verdes del país y una de las que goza de un clima más “templado”. Bueno templado, lo que se dice templado, para el estándar español ya os digo que no lo es, pero para el mongol sí. Y es que, en invierno aquí la temperatura no baja de 30 bajo cero.

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A parte de los tres lugares que no os tenéis que perder en Tsetserleg daos una vuelta por la ciudad.

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Tsetserleg es pequeña y bastante agradable. Lo mejor es que encontrarás tiendas, donde podrás comprar comida o cualquier otra cosa que necesites.

Hasta muchos días después no volveríamos a pisar una ciudad, así que estuvo bien dar una vuelta y sobre todo, por ver el quehacer diario de la gente de Tsetserleg.

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Creo que nos había entrado un ataque de morriña urbanita. Echábamos de menos ver gente, ya que en nuestro recorrido por Mongolia, solo nos encontrábamos nómadas que no eran demasiado dicharacheros que digamos, y la mayor parte del tiempo, lo habíamos pasado en paisajes infinitos en los que el silencio era el rey. Así que estuvo muy bien pasear por la ciudad.

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Una de las cosas más curiosas que podréis ver en Tsetserleg, aunque lo veréis en todos los mercados de Mongolia, es que se utilizaban como locales los antiguos contenedores de carga.

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El reciclaje aquí se lleva a su máximo apogeo, una buena idea que evita pagar el alquiler o comprar un local.

Que ver en Tsetserleg Mongolia

Roca Taikhar

A unos 22 Km de Tsetserleg se encuentra un sitio especial que hay que incluir en la lista de lugares que ver en Mongolia Central, la roca Taikhar.

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Lo curioso de este pedazo de roca de granito de 20 metros de altura es su ubicación, ya que está en medio de la nada, como si estuviera fuera de lugar. Precisamente porque parece que no pinta nada aquí, está rodeada de varias leyendas que tratan de explicar su ubicación.

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A lo largo de la historia, la Roca Taikhar ha sido importante para los que han vivido en la zona de Tsetserleg. Desde el periodo neolítico comenzaron a grabar en su superficie toda clase de símbolos y figuras de animales. Desde entonces, ha sido cubierta sistemáticamente con inscripciones. Se han contabilizado más de 150 en idiomas y periodos diferentes. En ellas se expresan deseos, rezos, versos y oraciones.

La inscripción más antigua es rúnica y se cree que fue realizada en los siglos VI o VII. Incluso en alguna de estas inscripciones se hace mención a famosos personajes de la historia mongola.

Lo cierto, es que todos los que pasaron por aquí a lo largo de la historia, plantaron su nombre, y los superpusieron sobre los antiguos escritos en tibetano, uigur o sogd, que ya apenas se pueden leer. Por esta razón el gobierno de Mongolia decidió proteger en 1994 esta roca sagrada.

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El patrón grafitero era el mismo siglo tras siglo, eso sí, si alguien lo hace ahora es un vándalo y un gañán, pero dentro de 3.000 años, su pintada del 2019 se convertirán en un incunable digno de la máxima protección. Que pátina tan preciada imprime el tiempo….

Para reafirmar su significado religioso, en la parte superior de la roca se colocó un oovo, es decir, un montón de piedras sagradas.

Los científicos explican, que la razón de encontrarse allí, es simplemente por culpa de la erosión, producida por la fricción del agua del río Khoid Tamir, sobre las paredes del acantilado por el que circulaba. Tantos siglos de roce, dejaron la roca aislada en medio de la nada.

Pero con independencia de las explicaciones científicas, los lugareños cuentan a través de leyendas porqué la Roca Taikhar se encuentra allí.

Leyendas de Taikhar Rock

Una de las leyendas más famosas que intenta explicar el origen de la roca Taikhar, cuenta que en éste lugar había una gigantesca serpiente que se tragaba tanto a personas como animales. Por supuesto, los lugareños pedirían ayuda a un héroe llamado Bukhbilegt. Éste para solucionar el problema, decidió pegarle una pedrada al agujero en el que se escondía la serpiente para sepultarla y ahí quedaría la roca Taikhar de recuerdo.

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Otra leyenda sobre la Roca Taikhar cuenta que, en la zona había dos enamorados. Un malévolo jefe local se había fijado en la chica y la quería para él solo, por lo que iba a impedir a toda costa el amor entre ambos. La chica salió huyendo hacía el río, puesto que querían obligarla a casarse con el cacique. Su enamorado fue tras ella pero la chica no apareció. El muy incauto se quedó esperando toda la eternidad convirtiéndose en esta roca.

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La Roca Taikhar es un lugar muy concurrido por el turismo, sobre todo local. Una de las cosas que más les gustaba a los turistas mongoles, era hacerse fotos a lomos de yaks, renos o sujetando una gigantesca águila.

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Durante todo el recorrido por Mongolia esperábamos ver esa imagen de los nómadas galopando con sus águilas en el brazo. Pero no, no lo vimos, ya que no estuvimos en la zona de Altái. Así que nos tuvimos que conformar con esta versión cutre y turística, para los niños mongoles que cogían las águilas o se montaban en yaks y renos para fotografiarse con ellos ☹.

Monasterio Zayan Gegeen

Otra de las cosas que tenéis que ver en Tsetserleg es un monasterio situado a los pies de la montaña Erdenebulgan, también llamado Zaya Huree.

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En 1586 un lama que se había reencarnado nada menos que tres veces, fundaría este monasterio.

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El monasterio es de madera, piedra y ladrillos azules. Se construyó inspirándose en el estilo arquitectónico tibetano y en su interior albergaba tres templos en los que se enterraron los tres lamas Zayan Gegeen.

En la época de mayor auge en este lugar, había más de 20 templos y en el monasterio Zayan Gegeen vivieron más de dos mil lamas. Su ocaso llegaría con el régimen comunista.

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Zayan Gegeen se libró de la destrucción de monasterios realizada durante la purga comunista, gracias a que durante ese periodo fue utilizado como almacén. Después pasó a convertirse en un museo etnológico y ahora se conoce como el Museo de Arkhangai Aimag.

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Como quedaron tan pocos monasterios en Mongolia, merece la pena que lo visitéis, ya que es una pequeña joya del país.

Museo de Arkhangai Aimag

En la sala principal del museo Arkhangai Aimag veréis recreado con mobiliario, instrumentos musicales, vestidos, sillas de montar, incluso con un yak disecado, el estilo de vida nómada tradicional de Mongolia.

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Dentro, además de una biblioteca, también hay exposiciones sobre la fauna y flora local, así como objetos religiosos

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Horario: En verano (de junio a octubre) de 9:00 am a 19:00pm De Octubre a Junio (invierno) de 9:00am a 18:00 pm

Monasterio Buyandelgeruulekh

En Tsetserleg también podéis visitar un monasterio. Nosotros no subimos ya que nos dedicamos a pasear por la ciudad. Se encuentra en una de las colinas de Tsetserleg y domina toda la ciudad, es el Monasterio Buyandelgeruulekh.

Detrás de una impresionante estatua de Buda de 7 metros, que se veía desde el templo de Zayan Gegeen, se encuentra esta colina rocosa llamada Bulgan Uul, casi es vertical. Allí hay algunas grandes inscripciones y pinturas budistas.

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Nos metimos en el coche para dirigirnos a nuestro siguiente destino, el Parque Nacional Terhiin Tsagaan Nuur, también llamado el Gran Lago Blanco, pero antes de llegar pararíamos en una gran brecha en la tierra, las gargantas del río Chuluut.

En el camino nos encontrábamos con caravanas de nómadas que habían pasado el verano en Tsetserleg. Iban plegando sus bártulos y comenzaban su recorrido para buscar un nuevo lugar dónde pasar el duro invierno mongol.

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Todas sus pertenencias iban en carretas de madera cargadas hasta las topes. El rechinar de la madera de las ruedas marcaba el ritmo a los yaks que iban tirando de ellas.

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Las gargantas del Río Chuluut

En medio de la estepa, se abre en el suelo una inmensa garganta tallada sobre las paredes de basalto, por ella serpentea el río Chuulut, que significa río pedregoso.

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El río hace un viaje de 415 kilómetros por las estepas mongolas, pero este punto, es sin duda el lugar más escénico por el que discurre.

Parece ser, que el origen de esta fractura en la tierra se produjo tras un terremoto. En la zona hay varios volcanes, en algún momento alguno erupcionó y el magma se introdujo por la hendidura que había provocado el terremoto. Así se formarían las gargantas del río Chuulut.

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En la zona hay cuevas con pinturas rupestres del neolítico y la edad de bronce. Nosotros no las vimos, lo que hicimos fue dar una vuelta por la zona siguiendo el curso del río, que alberga peces gigantes, los taimen.

Los taimen son unos salmones monstruosos que pueden medir hasta un metro de largo. En el río Chuluut también un montón de truchas, que hacen las delicias de los aficionados de la pesca con mosca.

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Eran las 5:30, se nos estaba haciendo muy tarde y aún teníamos que llegar a nuestro siguiente campamento, situado cerca del extinto volcán Khorgo. Al día siguiente lo primero que haríamos sería ascender hasta la boca de su crater, pero esa es otra historia:)

Os dejo un mapa con todas las ubicaciones😊

Feliz fin de semana:)

17 comentarios en «Tsetserleg, la Roca Taikhar y las Gargantas del Río Chuluut»

  1. Precioso como siempre, un lugar que a nosotros no se nos ocurriría visitar ‍♂️ y que equivocados ‍♂️ después de pasear contigo por ellos… entran ganas un lugar especial, leyendas (esta parte siempre nos gusta), naturaleza (el río es precioso ) un besazo corazón

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    • Muchas gracias Formó parte de nuestra ruta por Mongolia, son lugares muy poco conocidos por los turistas eso es lo bueno, pero se hace muy largo viajar por esos lares. Disfrutar del finde

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  2. Vaya pueblo con encanto. En Kyrgistan tambien usan los contenedores como tienda. Cómo lo vea algún hypster, los tenemos aquí de moda en 4 dias. El monasterio es impresionante y el águila será todo lo turistada que tú quieras pero es increíble. Las fotos de los nómadas muy chulas. Siempre elegís destinos para vuestros viajes poco frecuentes. Para cuando un monográfico de Marina D’Or . Un beso y buen finde.

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  3. Las fotos, la descripción de tu viaje es suficiente para acompañarte en tu viaje a Mongolia. es una experiencia única que de seguro que te va a acompañar siempre en tu bitácora. Saludos.

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  4. Me fliparía ir a Mongolia y a Irán. Y me encanta aprender leyéndote. Muchas gracias, Bea, que tengas un septiembre cargadito de información!!!

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    • Muchas gracias David, Irán seguro que te encantaría es un destino 10 por todo, el país que es precioso y su gente. Mongolia es más el día de la marmota aunque tiene lugares bien curiosos. Un besote y a ver cuando vuelves

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